El amor no se busca, se encuentra…es que todavía no has conocido a la persona adecuada…el día menos pensado aparecerá alguien especial…¿estás hasta las narices de oír estas frases y que sigan pasando los años sin novedad en el frente amoroso?
Con el auge de la filosofía single, la soltería como opción de vida se ha despojado de las connotaciones negativas y la presión social en torno a conseguir pareja parece haberse relajado. La paradoja es que nunca hasta hoy ha existido tanto negocio en torno a encontrar a la media naranja. Que se respete más la pluralidad de elecciones existenciales al tiempo que por otra parte parezca fomentarse salvajemente el tener a alguien a como dé lugar, sólo es una muestra más de los tiempos de esquizofrenia emocional que estamos viviendo.
Pocas personas son tan independientes afectivamente como para sustraerse a este constante bombardeo en el que el sé feliz por ti mismo versus encuentra alguien que te haga feliz conviven alegremente dando lugar a relaciones bipolares en las que uno acaba por no saber ni quién es, ni lo que quiere, ni qué diantres era lo que se suponía que tenía que hacerle feliz.
Pero ¿qué ocurre cuando ni siquiera puedes elegir porque ni por las buenas ni por las malas has tenido una pareja?
Si sientes la soledad como una losa y no paras de preguntarte si te irás al otro barrio sin conocer lo que es amar y ser amado por alguien, seguramente no acabes de ver el porqué otras personas (menos atractivas, o menos inteligentes, o menos interesantes que tú) consiguen aquello de lo que tú empiezas a creerte incapaz.
Las causas pueden ser diversas: baja autoestima, demasiadas exigencias, imagen idealizada del amor, autoboicot, miedos no resueltos o que simplemente que la pareja haya sido para ti un objetivo secundario en la vida. Puede que ya hayas llegado a plantearte qué hacer, si rebajar tus expectativas o bien empezar a adoptar gatos.
Sea cual sea el origen de tu situación actual, tu pregunta será la misma ¿podré encontrar el amor? ¿o estoy destinado a la soledad?
En realidad, estás destinado a lo que te dé la gana destinarte. Como ser humano, te han equipado para sentir emociones, usarlas o no depende de ti.
La mayoría de las personas nos ejercitamos en la carrera sentimental a base de tener parejas buenas, malas o regulares. Cometemos mil errores, ponemos toda la carne en el asador, nos enamoramos hasta las trancas, nos hacen daño y lo hacemos nosotros, nos caemos, nos levantamos, aprendemos qué nos gusta, qué nos disgusta y así, como niños que deben chocarse contra todas las esquinas y meter los dedos en todos los enchufes, vamos sabiendo por dónde tenemos que ir.
Si en tu vida nunca te has mojado el culo porque ha preferido quedarse sentado/a cómodamente en la orilla esperando a ver si por un casual aparece el amor que se ajuste perfectamente a todos tus requisitos, mejor cómprate un buen sofá y empieza a enamorarte de tu soledad.
Pero si realmente quieres conocer el amor, te tocará alistarte a esta guerra. Salir de la zona segura y saltar sin paracaídas. Dar pasos y tomar iniciativas. Lanzar besos y reírse de las cobras. Asumir que un rechazo no es el fin del universo. Averiguar que las relaciones son para aprender, no para hacerte eternamente feliz o cuidarte cuando seas viejo. Disfrutar de las caricias y sobrevivir a las coces. Entregar lo mejor que puedas dar y si esto no es suficiente, aprender a dar más. Observar las señales y situarte en los lugares donde puedan encontrarte.
Salir a la vida, hacer cosas que te den miedo, abrazar a los amigos, sonreír a los extraños, bailar en el ascensor, silbar en la calle o simplemente darse permiso para volverte loco/a al menos cinco minutos al día. Descubrir que a veces la mejor manera de no sentirse solo…es cuando puedes elegir estar solo.
Dice Hecatón: te descubriré un modo de provocar el amor sin filtro mágico, sin hierbas, sin ensalmos de hechicera: si quieres ser amado, ama.
A día de hoy, aún no he conocido a nadie que aprendiese a amar sin haberse pringado hasta los codos. ¿Te quedas o te vienes?
Y ser tú mism@, es la mejor forma de amar, aunque no se logre ligar demasiado.
Me gustaMe gusta
He recuperado este post porque esta Navidad he tenido que escuchar el consabido «a ver si el año que viene somos uno más» (refiriéndose a que me echara un novio ya). La verdad es que para mí esto de la soltería es novedad. Estoy descubriendo las ventajas e inconvenientes y también haciéndome muchas de las preguntas que planteas aquí.
Me gusta saber que al final todo depende de nosotros y no estamos predestinados a nada. Lo más importante es enamorarte de ti mismo y de los pequeños momentos. Se puede ser muy infeliz aún estando en pareja o muy feliz disfrutando de un viaje en solitario o de un té en una cafetería con encanto. La cuestión es aprender a sentir verdadero amor, satisfacción y placer en acciones cotidianas.
Tomo esta etapa de soltería como un aprendizaje aunque no renuncio a una pareja en el futuro. No me obsesiono y no me dejo llevar por lo que digan los demás. Creo que esa obsesión social por emparejarte es una especie de conjura de sus propios miedos 😉
Me gustaMe gusta
Hola, quisiera pedirte tu consejo respecto a mi situación. Soy un joven de 33 años que nunca ha tenido novia, ni menos experiencia con las mujeres. Admito que inconscienteme sacrifiqué mi vida afectiva en pro de mi sacar mi carrera y mi Doctorado en ciencias. Sin embargo, hace 5 años que rompí esa burbuja, y que experimenté amor por una mujer. Lamentablemente, las circunstancias en ese entonces no permitieron que existiera una relación (estuve sólo dos meses en el país dónde ella recide). Desde entonces que empecé a cambiar mi forma de ser con las personas, ser amable, amigable, honesto, empático. Llegó un punto dónde no pude avanzar más, y me dí cuenta que sufría rasgos de ansiedad social, sobretodo con el sexo opuesto. Así comenzó mi crisis existencial, acompañado del termino de mi doctorado, el cual no disfruté. Me di cuenta que hice grandes sacrificios a nivel personal por una carrera que al terninarla ya no era gratificante. Todo esto último sucedió hace un año atrás. Comenzé a ir a terapia para cambiar y sanar mis vacios emocionales y carencias afectivas. Actualmente creo que he superado mayormente mi ansiedad social. Soy una persona sociable y amistosa, pero aun algo introvertida (no es fácil tener el don de la palabra y sentido del humor para hacer reir a todo el mundo). He probado varias actividades gratificantes como capoeira, tango, salsa, bachata, yoga, danza, y gimnasio. Tengo buenas amistades, pero sigo estando/sintiendome solo. Aún no encuentro una mujer que corresponda a mis sentimientos, acompañado de que no sé darme cuenta si me quieren sólo como amigo o algo más, y menos pasar a la acción. Invito a salir a las pocas mujeres que he conocido a comer, al cine, a tomar un café o una cerveza. Las trato de beso y abrazo. Logró crear lindas amistades con ellas, pero aún no se cómo llegar a algo más. Además que varias también ya tienen pareja. En fin, no sé cómo seguir avanzando en mis cambios. Siento que he perdido el norte de mi vida. Mi trabajo ya no me enriquece y a veces quiero mandar todo a la mierda. Disfruto un montón la compañia de mis amistades, pero cuando estoy sólo me empiezo a bajonear. No sé cómo «sanear/cubrir» mis deseos afectivos y sexuales. En mis momentos más grises he intentado visitar escorts, he concertado algunas sitas, pero nunca he concretado, porque no me he sentido cómodo con ellas. Creo que voy a retomar terapia, porque no me siento bien con mi vida. No me siento pleno.
Me gustaMe gusta
Hola Jorge,
Para iniciarte en el mercado amoroso, hay que vivir esa etapa de descubrimiento, inseguridades, miedos, aciertos y errores con lo que empezamos a aprender de qué va esto de las relaciones. Si pretendes saltarte esta etapa con prisas para tener a alguien ya mismo, el resultado será que te encuentres una y otra vez con la misma situación, pues las personas queremos ser escogidas, no necesitadas como salvavidas de alguien que se siente vacío.
Esta etapa normalmente se suele vivir en la adolescencia y en la veintena, pero en otros casos como el tuyo llega más adelante porque has antepuesto prioridades diferentes, de cualquiera manera no es relevante: tienes que hacer rodaje y adquirir tablas como podrías haberlo hecho con 20 años.
Date permiso para vivir y aprender, para coleccionar calabazas, para arriesgarte a recibir noes (y síes), para cagarla más de una vez, para acertar alguna otra, en definitiva, para experimentar e ir desentrañando cómo funciona el mundo de las relaciones. Y un consejo extra: recuerda que las mujeres somos seres humanos corrientes y molientes, también a veces nos sentimos vacías, tenemos miedo o carecemos de experiencia, al igual que tú. No las trates como a algo superior a lo que tienes que rendir pleitesía para que te regalen a cambio una especie de tesoro, porque ese tesoro no lo tenemos nosotras. Nosotras tampoco vinimos a este mundo con un manual de instrucciones para ser felices.
Interactúa con las mujeres para conocerlas y construye amistades sinceras y vínculos auténticos que te aporten, y verás la diferencia.
Saludos
Me gustaMe gusta
Hola Jorge, yo soy Patricia tengo 31 y tampoco encuentro a ningun chico que me guste.
Me gustaMe gusta
Hola Patricia, ojala la vida te sonría en algún momento. Por mi lado, la vida aún no me sonríe. Una amiga me decía que me faltaba expresar más soltura con las mujeres. El caso es que me di cuenta que actualmente no tengo soltura con nadie porque no soy feliz en mi vida personal/social/afectiva en la actual ciudad donde vivo. Estoy en ella por tema de trabajo. Es una ciudad chica y la gente es cerrada y no muy dable a crear lindas amistades. Al final, me di cuenta que lo que realmente quiero y necesito en la vida no se consigue con dinero, exito o reconocimiento. Es por eso que ya he decidido renunciar en buenos terminos a mi trabajo, regresar a mi pais natal y tomarme un tiempo, un año sabático, para recuperar mi vida social y afectiva, y dedicarme a actividades gratificantes con más corazón y espíritu, y menos cerebro que la carrera que estudié.
Me gustaMe gusta
Hola Patricia, ojala la vida te sonría en algún momento. A mi aún no me sonríe, pero no pierdo la esperanza. Me di cuenta que mientras no me sienta del todo felíz con mi vida y conmigo mismo no podré «iluminar» lo mejor de mi. Es por eso que ya he decidido dejar mi trabajo actual y regresar a mi país natal, a tomarme un tiempo, quizas un año sabático, para recuperar mi vida personal/social/afectiva/sexual, y dedicarme a algo que me llene más de corazón y espíritu, y no sólo de mente como es mi profesión. Ahora sé que lo que realmente quiero y necesito en la vida no se consigue con dinero, exito o reconocimiento… así que ya tengo un filtro bastante eficiente para encontrar una buena pareja. Saludos.
Me gustaMe gusta
Tener pareja estable tampoco es una cosa casi de voluntad. Conozco gente muy predispuesta y no encuentran nada ni a tiros y al revés. Lo que pasa es que muchas veces es simplemente algo que surge sin que te des cuenta. La gente que tiene más vida social tendrá más facilidades pero por experiencia creo que eso tampoco te garantiza nada. Ojalá hubiera una fórmula matemática para encontrar a alguien adecuado pero todo en la vida es más complejo. La clave supongo que será que estés con alguien y que alguien quiera estar contigo porque hay algo, algo que solo sientes con esa persona, no por dejar de estar solo. Yo no me cierro a nada, he tenido pareja 6 años y sé lo que es estar de un lado y del otro. Lo que tenga que sea, es bonito tener a alguien que te quiera pero si no se encuentra hay que seguir, porque la motivación en la vida debe ser estar a gusto con uno mismo y con la gente que te quiere.
Me gustaMe gusta
Hola, he caído en este hilo ahora que hace ya unos meses del post y me ha interesado este comentario. Definitivamente, tener pareja no es una cosa de voluntad y me entristece. Llevo años pasándolo mal y no hay manera de darle fin por más que quiera. Parece que mis únicas opciones son, o estar sola, o juntarme con alguien que sólo me va a dar migajas de mal amor. Con las amistades es un poco lo mismo…es muy difícil conocer a gente porque todo el mundo es muy distante y todo está muy compartimentado…cuando lo haces no se congenia por esto o por lo otro…al final ha acabado por no gustarme la gente. No veo que la gente se trate bien entre ella, la verdad.
Me gustaMe gusta
Yo ahora mismo tengo la misma sensación que Nuria. Por más que uno lo intente parece que te das con una pared de soledad. Y por más esfuerzo y buena voluntad que le pongas no sabe uno ya ni por dónde empezar.
Me gustaMe gusta
Que maravilloso blog! Cada entrada que me encuentro es como una llamada que siento dirigida a mi directamente! Cristina, encuentro tus consejos muy sensatos, pero no logro quitarme la sensación de que haga lo que haga,- y lo he intentado todo, y lo sigo intentando- no logro transmitir la impresión auténtica que tengo con el hombre que me gusta. Hasta a veces me pregunto si por sensata, parezco fría; si por cerebral, parezco pasota o inmutable. El comentario de arriba de Jorge se me podría aplicar a mi, palabra por palabra: Es muy desalentador ver que pasan los días, los meses y los años y aunque hagas «el pino con las orejas» nada cambia en tu vida sentimental.
Me gustaMe gusta
¡Hola Ananda!
No sé si he comprendido bien, pero ¿por qué necesitas dar una «impresión’ determinada? Si el objetivo es encontrar una pareja, se presupone que la pareja estará con la persona que realmente eres…vamos a ahorrarle la decepción siendo nosotros mismos desde el inicio…
Me gustaMe gusta
Hola Cristina.
Tiene 3 meses que terminé una relación de 3 años y medio y estoy en la etapa del duelo, pero me siento mucho mejor que al principio.
He tenido muy mala suerte en el amor, tengo 34 años, mi primer beso fue a los 25 años. Creo ser una persona muy tratable, aunque algo seria e introvertida. Mi hermana es mi polo opuesto, pero es mi mejor amiga, ella es alegre, jovial, sonriente,popular, etc. y yo todo lo contrario, ella incluso me dice ( pero no por mala intención) que soy la persona más rara del mundo,me hace sugerencias para mejorar, pero creo que no podría cambiar, incluso en mis fotos de cuando era una bebé de meses, tengo la cara más seria del mundo. No lo hago a propósito, pero me han dicho que parece que estoy enojada todo el tiempo, cuando eso no es así. También tengo ciertos gustos diferentes a la mayoría de la gente, por ejemplo: no me gusta ir al cine,ni ver películas, sólo pocas me gustan, y me siento mal cuando me dicen que eso es imposible, que a todo el mundo le gusta ir al cine, pero te lo digo muy sinceramente, NO ME GUSTA IR AL CINE!!!,me siento encerrada, me aburro, otro ejemplo es la música, la cual me encanta, pero nunca me ha gustado la música «del momento», la que se oye todo el tiempo en la radio y no es por querer ser diferente y llamar la atención, simplemente,siempre he sido así. Pero realmente siento que soy la persona más rara del mundo y que nunca voy a encontrar una persona con mis mismos gustos. Y por cierto, tengo un posgrado y no creo tener algún tipo de autismo o de enfermedad psiquiátrica, en fin,disculpa que diga todo esto,es para desahogarme y esperando algún consejo como los tantos sabios consejos que das. De verdad soy tan anormal??
Me gustaMe gusta
Hola Reyna,
Pues tendrás que darme más argumentos para entender ese «eres la persona más rara del mundo», porque ni ser introvertida, ni ser seria, ni no gustarte ir al cine, ni escuchar música fuera de la radiofórmula son características raras, extravagantes o peculiares de ninguna manera….
Por demás no es necesario encontrar una pareja que tenga los mismos gustos que tú, una pareja no necesita ser un clon para funcionar, sólo ser complementarios.
Abrazos!
Me gustaMe gusta
y volviendo al tema, ¿Por donde empiezo? Me han abandonado hace poco y estoy empezando el duelo. Comprendo que no es el mejor momento para volver al mercado. Pero para cuando pueda empezar de nuevo no sabría por donde empezar. Mi ex fue la que se interesó por mí hasta que la conquistó otro. Yo siempre he tenido responsabilidades, cargas con mis padres y mucho miedo y timidez. ¿Como se hace para conocer gente? ¿Páginas web? Debo estar apuntado a todas. (es broma) ¿Discotecas? No me gustan… Y otra cosa ¿Hay esperanzas ya para un tio de 46 años, más bien feo? ¿Cómo empiezo a salir de mi sofá?
Me gustaMe gusta
Yo lo siento si hiero susceptibilidades, pero hace años que a mi alrededor sólo veo a gente rara o, directamente, mala gente. No es tanto tener pareja o no, sino dar con alguien normal. No es el lugar para empezar a explicar experiencias, pero dan para un libro. En esta vida hay muy mala gente y personas que, directamente, tienen carencias emocionales importantes.
Me gustaMe gusta
Hola, encuentro divertido tu comentario, fijate. Te encuentro razón en cierto punto a que la gente es rara, pero no mala … quizas estúpida. Me parece que nadie escapa a la realidad de haber sido criado en un seno familiar disfuncional y de carencias emocionales. Por lo mismo creo que hay que ser tolerante y agradecido de que no estamos tan jodidos como el resto. Lo que si es importante, es que a pesar de sentirnos «solos», no debemos tranzar con nuestra autoestima e inteligencia emocional, dejando entrar a cualquier persona que nos haga mal emocionalmente. En mi caso particular, creo que dejé ser tímido, y ya interactuo con cierta normalidad con las personas. No obstante, también he recibido duras lecciones de vida de qué tipo de personas no quiero en mi vida, y me he vuelto más selectivo, pero no pesimista de que algún día la vida me va a sonreir. Como dice un meme: encontrar a una persona con tu mismo desorden mental no tiene precio, jajaja.Saludos.
Me gustaMe gusta
Aquí me he acordado de una entrevista a la actriz Leonor Watling que decía algo así como: «El secreto no es buscar a alguien que no sea un neurótico, sino encontrar a alguien cuyas neurosis sean compatibles con las tuyas» 🙂
Me gustaMe gusta
Es curioso como tod@s empleamos el término gente de manera excluyente con nosotros mismos. La gente es esto o lo otro… No parece que nos demos cuenta de que nostros mismos somos gente para los demás.
Me gustaMe gusta
Hola! muy bonito post! me ha dejado un poco pensando sobre mi vida…que la finalidad de esto es esa…que reflexionemos… hoy es uno de esos días que me cuestiono el estar solo y que me gustaría tener una pareja…pero leyendo este post y algunos comentarios me he dado cuenta que soy de los que le gusta la orilla…me siento muy cómodo con mi soledad la mayor parte del tiempo…tengo mi mundo…mi equilibrio creado…por desgracia soy perfeccionista y de mente cuadriculada y cada cosa tiene que ir en su sitio…creo que es mi mayor problema a la hora de encontrar una persona adecuada…me he acomodado a la soledad y aunque una vez al mes me toca la fibra y me pongo sensible y romántico perdido…ese día me acuesto temprano y me digo a mi mismo: mañana se te habrá pasado! buenas noches! jajajaajajajajajajaaj y es que es eso…me da miedo a abrirle mi vida a alguien y que me desestabilice el universo…pero bueno creo que es eso…entropia…desorden…caos…es la base de la evolución…si el mundo se hubiera quedado invariable…seríamos aun bacterias flotando en un mar de cosas… (con perdón de si hay alguien con ideas religiosas…la versión sería: no existiría el universo si Dios no hubiera dicho hágase la luz! ) lo que quiero decir es que a veces necesitamos ese empujón, esa chispa que nos saque de la comodidad de la estabilidad…y como dice el post hay que ser locos…felices…amar…y para terminar si hay alguien que le guste leer recomiendo: Verónica decide morir de Pablo Coelho… muy bueno sobre el tema!
Me gustaMe gusta
Hola Johnny,
Creo que todas las personas que hemos pasado un tiempo solteros, por más a gusto que hayamos estado así, hemos tenido esos momentos de bajoncillo sentimental, o de echar de menos tener a alguien puntualmente. Y a veces, no es un bajoncillo, sino un señor bajón. El deseo de emparejarnos es un deseo tan innato que pocas son las personas que pueden desapegarse totalmente de ello y tampoco se trata de extirparlo. También las personas emparejadas tenemos nuestras melancolías y nuestros bajones por otros motivos: porque nos sentimos incomprendidos, porque echamos de menos a los seres queridos que ya no están, porque querríamos dejarlo todo e irnos a vivir a las Maldivas :)…En definitiva, se tienen eso momentos porque la vida no es perfecta y nosotros, tampoco.
El estado ideal es estar bien, pero con ese puntito de insatisfacción que te hace indagar más allá, que es lo que convierte en el ser humano en la criatura curiosa, exploradora e inventiva que puede llegar a ser.
Abrazos!
Me gustaMe gusta
Hola, buenos días. Tengo 27 años y llevo más de dos años sin pareja. Aprovecho esto del anonimato para extenderme y proceder a explicar mi caso o mis sensaciones. Desde pequeño siempre fui el típico niño gordito, el que nunca tenía éxito con las chicas (hablamos de adolescencia, claro). Creo que no pisé una discoteca o un pub de marcha hasta pasados los 20. Tampoco besé a ninguna chica hasta los 21. Y es que ahí es donde empezó todo. Me he sentido muy identificado con todo eso de «baja autoestima», «imagen idealizada del amor» y hasta lo del «autoboicot». Un día di con una chica que me encantó a primera vista. Así era cómo yo concebía el amor. No saber explicar cómo desde el primer momento alguien puede atraparte. Hice todo lo posible por conocerla y, efectivamente, nos conocimos. Ese estado «zen»/enamoramiento no duró mucho. Tal vez un mes. O poco más. Y entonces empecé a hacerme preguntas. Hasta que llegué a la conclusión de no estar enamorado y dejarla. A día de hoy creo que si hubiera sido capaz de disfrutar de aquella historia hoy todo sería diferente. Tomármelo con calma. Sin agobios. Pero no lo hice. Y todavía pago mi penitencia.
Siguiente chica, apenas un año después. Desde el principio sabía que esa atracción física era fuerte pero por el motivo que fuese algo me impedía avanzar. Es que no me apetecía. No obstante, hice todo aquello que aquí se recomienda: conocer, lanzarme a la aventura, probar, etc. Lo hice. Desastre. Duró poco. No sé si dos o tres meses de «estar» juntos, aunque serían aproximadamente seis desde que empezamos a hablar. Como ya tenía referencia de lo que era estar solo, apliqué el contacto 0 y me recuperé razonablemente rápido. Con el tiempo me dijeron que ella no había olvidado a su ex y todavía andaba pensando en él (relación tirita en la que fui utilizado, bien).
Me encontraba bien, pasó un año et voilà. Otra vez una chica que me atrapó. En este caso nos conocimos de casualidad y por twitter. Teníamos vínculos comunes en nuestra ciudad en España, pero ella era de otra bastante próxima a la mía. Hablamos, hablamos, hablamos y sin darnos cuenta nos atrapamos.Al poco tiempo vino a mi ciudad, nos conocimos, yo fui a la suya, seguimos… y así, casi sin saber por qué, todo se enfrió y se acabó. Con el tiempo me di cuenta de que otra vez ocurrió como la vez anterior: un ex no superado. Volví a mojarme el culo, a pringarme, a apostar, hasta a plantearme una relación así… y nada.
Y dos años después sin pareja, aparece una chica en el trabajo con la que congenié desde el minuto uno. ¿El problema? Tiene pareja. Nos queremos mucho. Pero no puede ser. «Si yo no tuviera pareja..:» fue su frase recurrente. Pero tiene. Y la quiere. Pero siento que soy importante para ella. En serio lo siento. Hasta hace unos meses tuvimos una fase de mucho acercamiento, de querernos, de estar a un paso de hacer todo lo que quisiéramos, pero no. Evidentemente si ella hubiera sentido ese «algo» amoroso por mi, hubiera dado el paso. Pero no. Yo no puedo ser su amigo pero tampoco puedo odiarla o desaparecer de su vida porque es imposible viéndola todos los días y porque, aunque ha cometido errores, como los he podido cometer yo, siempre hemos tenido muy claro cuáles eran las circunstancias. Vale. Resumen: vuelvo a pringarme hasta el culo. Sin éxito.
Decía antes que me sentía identificado con lo del autoboicot o ese tipo de cosas porque parece que siempre voy a mostrarme o a darme ante situaciones muy difíciles de las que lo más probable es que salga herido. Es como si no me diera la oportunidad a mi mismo de que algo me saliera bien. Maldigo de verdad mi primera reacción ante esa chica con la que me agobié. Porque si hoy día volviera a sentir aquello y fuera una relación posible, sabría perfectamente cómo afrontarlo. Pero la vida no me está dando esa segunda oportunidad. Me siento fuera de sitio con respecto a mis amigos, salvo alguno soltero, el resto va hacia adelante con su vida. Me hablaron de aplicaciones para conocer gente, me instalé alguna y no tardé en dar con chicas con las que podría haber tenido una relación esporádica en muy poco tiempo. No soy el tio que más te llame la atención del mundo, pero sí soy un chico majo, alegre, educado, divertido, etc. Es decir, sé que valgo aunque no sea Bradd Pit ni entre por los ojos desde el minuto uno. Pero aquí me encuentro. Lamiéndome otra vez las heridas de otra historia que no ha salido bien.
No soy de salir. No me gusta. No me apetece estar hasta las cinco o las seis de la mañana cada fin de semana cerveza en mano. No. Me gusta hacerlo en situaciones esporádicas o especiales. Por eso cuando me dicen que salga, que si no no voy a encontrar a nadie, pienso: ¿Es necesario? ¿En serio es necesario ir a esos sitios para encontrar el amor? Yo voy a pasármelo bien y ya está, pero sé que en ese ambiente no voy a encontrar a alguien especial. Entre otras cosas porque yo no voy a estar con el chip correspondiente. Me lo paso bien y ya está, pero no voy con afán de interactuar con nadie.
En defintiiva, que me quedo atrás. Que tengo 27 años y, aunque sé que soy joven, no encuentro lo que deseo. Sueños hay miles. Deseos, más bien. Y a mi, de nuevo, me encantaría saber cómo es eso de sentirme querido. Y querer. Y de verdad, no me precipito. Si quisiese tener novia simplemente por tenerla, ya estaría emparejado. Pero busco algo más. Algo que cumpla con mis expectativas, que me complemente. Y no llega. Y me frustra. En fin, la misma película de siempre. Me da pena pero día a día me voy rindiendo.
Gracias por darme la oportunidad de poder explayarme por aquí. Aunque nadie lo lea, al menos me he podido desahogar. Abrazos.
Me gustaMe gusta
Hola Anónimo,
Leerte, te va a leer más gente de la que crees. No sé si eso te gusta o te asusta 🙂
Me he acordado al ver tu historia, de mi primera pareja. Estuvimos un tiempo juntos, yo me desenamoré y decidí dejarlo. Era una persona realmente genial, nos compenetrábamos de maravillosa y la relación había sido muy buena, pero llegó un punto en el que para mí ya no funcionaba. A partir de esta ruptura, cada vez que tenía un traspiés sentimental con alguien, me acordaba de aquel primer novio y me decía «si no lo hubiera dejado…»
Di tú que cuando me volvía a enamorar y salía bien la cosa, ni se me pasaba por la cabeza esa relación o esa persona.
El aprendizaje del amor conlleva muchos tropiezos. Ante todo conlleva tropezarnos muchas veces con nosotros mismos. Por lo que dices, sueles caer a menudo con personas emocionalmente no disponibles. Chicas recién salidas de alguna relación o directamente, emparejadas. De nada sirve que pringues y te mojes si no tienes en cuenta las circunstancias de la otra persona. Este es un juego de a dos…
Idealizar historias pasadas cuando el presente no cubre nuestras expectativas, es algo normal. Lo hacemos casi todos en mayor o menor medida. Pero tienes la percepción de que todo depende de ti. Si hubieras seguido con esa chica, la duda habría estado allí y tampoco disfrutarías como crees. Puede que esa chica no te hubiera correspondido a fin de cuentas y hubiera decidido no seguir adelante. No culpes a esa vieja historia de lo que pasa ahora en tu vida, pues todo parte de ti, no de oportunidades no aprovechadas con chicas random.
Hay muchas oportunidades de conocer y conectar con las personas sin estar eternamente condenado a vagar por bares y discotecas…Desde aficiones comunes, hasta deportes, pasando por internet o actividades con amigos que tengan amigas. ¿O cómo te crees que nos apañamos aquellos a los que nunca nos gustó la fiesta ;)?
Si la chica que conoces saca a colación a algún ex reciente o está emparejada, pues ya puedes olerte lo que hay…si continúas a pesar de estas señales, bajo tu cuenta y riesgo.
Tener pareja no soluciona vacíos, inseguridades o problemas de autoestima, es más si son muy acrecentados, el tener pareja sólo los acentúa y los saca a la luz. Por esta razón existen tantas relaciones tóxicas.
Si quieres invertir en una posible relación, asegúrate de que además de atracción, feeling, chispa y demás, haya correspondencia, afinidad y amistad.
Abrazos! Y suerte en la búsqueda.
Me gustaMe gusta
¿¿Pero hay mujeres hoy a las que les guste algo más que la fiesta??😆😆
Me gustaMe gusta
Claro Miguel. Somos la mitad de la población planetaria. Si a todas nos gustasen las mismas cosas seríamos robots, no personas, como en aquella novela de Ira Levin. Y los bares y discotecas no cerrarían nunca con semejante demanda.
Me gustaMe gusta
Hola, soy el mismo chico que escribía en ese mes de diciembre de 2016 (cómo pasa el tiempo). Hoy me ha llegado un correo con estas respuestas y quería escribir de nuevo para volver a decir que podría reescribir esa parrafada dos años más tarde. De nuevo todo lo que intento sale mal. La última, hace unas semanas, después de unos meses de hablar, de conocernos, de estar bien…acabó de golpe y porrazo porque se agobiaba de ver que eso iba demasiado en serio. Mira, yo ya me lo tomo con humor. El amor no es para mi. Con 29 años y muchas experiencias (todas negativas) a mis espaldas, me doy cuenta de que hay personas que, simplemente, no estamos hechas para esto. No es normal que ninguna, NI UNA sola de las intentonas haya salido bien. Y soy el primero que soy muy duro y exigente conmigo mismo. Autocrítico quiero decir. Si hubiera hecho algo muy mal no dudaría en decirlo. Pero no. El argumento siempre es el mismo: ser demasiado bueno.
Ni lo soy ni quiero serlo ni lo pretendo. Soy como soy. Y me da asco que se me conciba así porque el éxito lo veo en aquellas personas que no lo son. En serio me doy asco. Y me enfada que me digan ese tipo de cosas.
Pero lo dicho. Es triste pero con 29 años renuncio. Y lo digo de corazón. No merece la pena mojarse el culo para ser siempre el que tenga después que ponerse tiritas. No es justo y yo ya no quiero apostar más.
Si alguien me lee y está en mi misma situación, no le voy a dar ningún consejo ni le voy a decir aquello de «ya aparecerá» o «la próxima vez tendrás más suerte». Que tengan muy presente que NADA CAMBIA. Hay destinos contra los que no se puede luchar. Hace dos años que escribí este mensaje. NADA ha cambiado. Simplemente resignarse a lo que toca hasta el final.
Me gustaMe gusta
Hola Anónimo,
Gracias por volver a pasarte a seguir contando cómo te está yendo.
Si en un camino topamos una y otra vez con la misma piedra, es momento de tomar otro camino. Lo difícil es decidir desapegarte del deseo de búsqueda, pero una vez llegado a este punto, nada tienes que perder.
Un abrazo y sigue contándonos
Me gustaMe gusta
Hola buenas ,mi historia es la siguiente . Yo antes era un niño bastante godito y causa de eso me quedaba en casa sin salir ya que me daba verguenza el que diran al verme , aun ahror con 19 años me sigue pasando pero menos. Ahora trabajo en un bar y la cara al publico a veces lo llevo un pco mal. Hace un par de años empece a darme cuenta que lo que necesitaba era amor ya que en otros tiempos habia tenido que ir psicologos por culpa de los acosos causados hacia mi persona , querria consejo para poder solucionar este problema y tener una persona a la que poder ver, hablar , reir y llorar con ella asta que la muerte nos separe o causas logicas de la vida nos separe . Un saldo y espero vestra respuesta.
Me gustaMe gusta
Yo tengo 24 años, estoy haciendo mi tesis de licenciatura, apenas mi novio (que está en maestría) me dejó porque no quería una relación seria conmigo y yo si lo quería pero él tenía problemas familiares y personales que resolver según me contó(ya que fuma marihuana y toma alcohol) ya se ha accidentado hasta llegar al punto de estar en coma inducido por lo mismo, yo acepté seguir con él porque lo quería y no me importaba que fumara o tomara (él es reponsable de sus decisiones) pero en el fondo sabía que algo no andaba bien y de alguna forma no media las consecuencias, me dejé llevar por mis emociones, creía que a pesar de todo no era tan malo, hace tres días que me dijo que ya no quería continuar conmigo, que no me veía para una relación de pareja y además que tenía ideas distintas a las mías en el sentido de que soy muy conservadora y aunque no voy mucho a la iglesia sigo los principios de Dios como por ejemplo: tener relaciones hasta casarme (yo sé que muchas veces no es bien visto que yo piense así pero así me educaron desde pequeña y es algo que traigo muy arraigado, creo que es muy respetable lo que cada uno piense y quiera) pero él no pensaba como yo y me dijo que no quería una relación a la larga, es decir algo como casarse o así. He estado sufriendo un poco porque creía que era el chico indicado y el huyó de mi porque decía que debía primero quererse a sí mismo, es decir resolver sus problemas y ya no hacerse daño, que no podía querer a alguien si no se quería a si mismo, en este sentido creo que está bien, en fin como dices «Si quieres a una persona, déjala ir y ser feliz» yo pienso que eramos como dos aves en una jaula, él voló y no quiso permanecer atado a mi, yo aún sigo teniendo miedo de volar pero sé que un día me quitaré ese temor y también volaré alto, estoy luchando por que sea pronto, no quiero quedarme para siempre en la tristeza y sé que también puedo lograr mis objetivos en mi profesión y quizás algún día encuentre al chico adecuado que me quiera como soy y me respete también y si nunca llego a encontrarlo no estuvo en mi simplemente no lo encontré y ya, obvio que tengo sueños de casarme y formar mi familia pero si no es posible pues creo que hay que aceptar las cosas como son y ser felices a pesar de todo.
Me gustaMe gusta