Prácticamente le acabas de conocer y te pregunta ¿crees en el amor a primera vista?. Te trata como a un rey o como a una reina. Promete más que un político en campaña. Sus frases van precedidas por el ‘nunca’: nunca había conocido a nadie como tú, nunca había pensando tanto en una persona, nunca había sentido esto antes…Sus amigos te dicen que no para de hablar de tí. Casi desde el primer día, te abre las puertas de su casa, de su vida y de su corazón y todos sus planes de futuro llevan tu nombre. ¿Te suena la película? Puede que estés siendo el nuevo/a protagonista del enésimo remake de Los vendedores de humo: el retorno.
Dice el refranero popular una frase que encaja a la perfección con el modus operandi de los vendedores de humo: arrancada de caballo, parada de burro. Si algo caracteriza a este tipo de comportamientos, es una prisa desproporcionada en establecer un vínculo que naturalmente debería construirse con el tiempo. A la mayoría de las personas les chocarán tantos detalles, tanta pasión y tantas promesas en alguien que apenas acaban de conocer. Quienes tengan una autoestima en su sitio y una visión del amor realista y madura, son prácticamente inmunes al efecto relámpago de los vendedores de humo.
Otras personas ignorarán su instinto y se lanzarán a la vorágine de histrionismo romántico que se les oferta a manos llenas, enganchándose a la nube de ego rosa generada por una historia -salvo algunos raros detallitos – digna de cualquier novela de Danielle Steel.
Cuando los vendedores de humo se desinflan, lo cual suele ocurrir en un brevísimo lapso de tiempo, la otra persona ya está tan enganchada al cuento de hadas que el aterrizaje hacia el duro suelo puede ser casi mortal (para la autoestima).
Tras ello, suele seguir un periodo en el que el comprador de humo se deja la vida para complacer al otro y poder recuperar el maravilloso sueño del inicio. Lo cual no ocurre nunca, ya existió un enamoramiento real. El caballo se convierte en burro y ahora resulta que quien va demasiado rápido eres tú.
¿Por qué existen personas que necesitan vender humo? Las razones pueden ser diversas. Vacíos circunstanciales, adictos al amor, adictos al romance, enamorados de su propia película, patrones afectivos de mala calidad, personalidades infantiles, trastornos de la personalidad…la tentación más habitual es la de psicoanalizar al otro en busca de sus taras. No pierdas el tiempo, ni los megabytes de tu ADSL: sus dramas personales no son problema tuyo ni tú vas a obtener las respuestas mirando en la Wikipedia.
En primer lugar, entender claramente que el amor requiere su proceso y se cocina a fuego lento. Que se aprende a amar lo que se conoce. Si muestran tal despliegue emocional al poco tiempo de encontraros, tened poca confianza en quien, no habiendo apenas tenido un trato íntimo con vosotros, es capaz de establecer unas conexiones tan rápidas y superficiales. Ya lo indicaba Erich Fromm el amor es una actividad, no un afecto pasivo; es un ‘estar continuado’, no un ‘súbito arranque’.
En segundo lugar, asumir que este comportamiento dista mucho de ser un halago. ¿Cómo va a serlo que alguien diga estar enamorado/a de tí, si apenas sabe quién eres, qué te gusta, que detestas, que te ilusiona, cuáles son tus sueños, tus dolores, tu esencia? Aparcar por un rato el subidón narcisista que nos producen los que nos venden el amor perfecto de las películas, es una medicina eficaz para poner las cosas en perspectiva.
Si estás en un momento bajo de tu vida o te sientes solo/a, recuerda que hay que estar bien para tener buenas relaciones, no meterse en relaciones random pensando que así vas a estar bien.
¿Estás ya enredado/a en la promo amorosa de un vendedor de humo? Escucha a tu instinto, rara vez se equivoca. Pon el freno, observa la situación y no permitas que fuercen tu ritmo. Si estás pasando una mala situación en tu vida o estás presionado por la necesidad afectiva, tendrás mayor propensión a iniciar relaciones inconvenientes en momentos inadecuados. Y sobre todo, antes de lanzarte de cabeza, repítete, como un mantra, este otro refrán: obras son amores y no buenas razones.
Que bueno esta esto Chris!
Mira que es verdad, gente tan habida de cariño que engaña y el otro que cae.
Muy buenas citas tambien.
Gracias por compartir todo esto!
Me gustaMe gusta
Tus articulos son realmente geniales. Todas estas situacion me pasaron en la vida, y seguramente a la mayoria de los que estamos aqui leyendo. Lo mejor de todo es que tiene ese toque de humor que lo hace mas interesante aún.
Me gustaMe gusta
Hola! soy Maria H. Mi historia de compra-venta de humo fue en verdad relampago.Duro apenas 10 dias. Comenzo con un reencuentro virtual en facebook ,siguio con un solo encuentro real y continuo con charlas de whatsapp donde se dieron la expresiones apasionadas que duraron poco y nada.Lastima que no hice caso a mi instinto porque me daba cuenta que algo no andaba bien.Sin embargo me enganche y aca estoy tratando de superar lo pasado.
Me gustaMe gusta
Hola! Me encanta tu página. Me enredo de un enlace a otro y pasa el tiempo volando.
Hace dos años te hice una consulta y considero que me ayudaste con el empujón que necesitaba para tener claro que dejar una relación tóxica era lo mejor para mi vida. Estoy muy agradecida por esto porque cada vez que lo pienso, siento alivio por haber dejado aquella vida.
Pero ahora, dos años después de aquello ,acabo de pasar por una relación intensa de dos meses con un vendedor de humo que me ha dejado algo tocada. Me pidió unos días para pensar porque estaba dudando de ser «capaz de darme lo que yo quiero», es decir, una pareja monógama con planes de futuro hacia una familia. Bueno, tengo 37 años , me veo bien físicamente, tengo buen puesto de trabajo y no tengo hijos pero tampoco me urge tenerlos, aunque prefiero estar con alguien que los quiera a que no.
Sé que éste último tampoco me convenía. Es muy guapo, nunca ha tenido una relación formal y si encuentros esporádicos con chicas ocho-diez años menos que él o cuando tuvo novias, haría diez años, tenía sus escarceos porque sinó le parecía aburrido,esto contado según él. No tiene trabajo estable y su sofá es su cama ;en lugar de salón, tiene las máquinas para hacer pesas y tiene el móvil cargado de fotos de él en pechos que de vez en cuando remira y me enseñaba.. Venir a mi dúplex le daba escalofríos y últimamente me decía que tenía que ir al gimnasio para ponerme fuerte y engordar un poco, pero no tanto porque sinó dejaría de estar conmigo. En fin, yo me lo tomaba a guasa y le decía que era un superficial pero quizás me tenía obnubilada su físico y porque al principio me decía cosas que me parecían tiernas como que cuando supiese lo tonto que es que lo iba a dejar , le habló a toda su familia de mi, me presentó a sus padres, llevaba mi foto en el móvil y de fondo de wasap y hasta me dijo que me quería y que me echaba de menos. Aunque a veces notaba que necesitaba espacio y yo me alejaba un poco , luego volvía con ganas, pero ya la úlima vez que quise pasar un festivo entero con él, empezó la cosa a caer en picado. Empezamos con discusiones telefónicas donde me decía que solo llevábamos dos meses y que íbamos «a piñón», que no estaba acostumbrado a dar tantas explicaciones y que hiciera mi vida. Finalmente , tras retrasar él todo lo que pudo , hablamos civilizadamente y me dijo, después de contarme , como lo hacía muchas veces, lo fácil que le resultaba ligar sin hacer nada el úlimo día que había salido con sus amigos, que necesitaba pensar unos días porque yo soy muy «buena niña», que se lo doy todo pero que no sabe si él podría darme lo mismo, que no sabe si alguna vez podrá enamorarse, que si tiene dudas no va a estar conmigo porque no quiere hacerme perder el tiempo, que sentía que estuviese pasando por esto.. que quedaríamos esa semana para tomar algo y que iríamos viendo. Accedí. Al día siguiente me escribió mensajes preguntándome qué tal estaba pero no le contesté y a la mañana siguiente le mandé otro mensaje diciéndole que yo ya había pensado y que no quería estar con él. Que se acababa el período de reflexión y me despedí con guasa con ninguna intención de quedar bien. No podía permitirme la agonía o que al final impusiese sus reglas y sentirme mal. Bueno, reconozco que su total indiferencia me fastidia pero llevo una semana dándole vueltas y analizando todo, tal y como explicas en tus escritos.
Ahora mismo no sé si estarme una temporada organizandome planes nuevos o apuntarme en una página de contactos para olvidarme de todo. Cada vez estoy más y más desesperanzada con el amor y con miedo a empezar relaciones porque los finales me hace mucho daño, aunque sepa que son lo mejor y entro en bucle.
Vaya rollo que acabo de soltar Cristina. Perdón a ti y a tod@s los lectores, que como yo están interesados en las vivencias de los demás porque ayuda a no sentirse solo en estas situaciones.
Un abrazo a tod@s.
Me gustaMe gusta
Hola Anónima!
Me alegro un montón de que te hayas podido recuperar de aquella relación y que haya pasado el suficiente tiempo para que puedas sentir que has tomado una excelente decisión.
Pero…las relaciones tóxicas no se dan solamente porque nos encontremos con personas con características problemáticas, sino porque nosotros mismos tenemos nuestro propio kit de carencias y miedos que afectan tanto a nuestras elecciones como a nuestra manera de configurar estos vínculos. El mayor reto cuando acaba una relación de este tipo siempre es la parte que nos enfrenta a nosotros mismos y que no dejamos atrás en la ruptura.
Si es que lo ideal es aprender no para estar cada dos por tres teniendo que afrontar rupturas, sino para acertar más y sufrir menos. Por más recursos que puedas tener para asumir el final de las relaciones, son procesos que suponen sufrimiento y desgaste y más siendo una persona que aunque no lo veas claro, te acabas implicando y entregando.
Y aquí está el quid de la cuestión y la pregunta más importante que tienes que hacerte a ti misma ¿por qué si quieres una cosa, eliges un camino que te lleva a la cosa contraria?.
Si estas desesperanzada y con miedo on el tema de las relaciones, ¿estás segura de que es el mejor momento para ponerte de nuevo a la búsqueda. Cúrate, intenta enfocarte en otros ámbitos, recomponón no sólo la autoestima sino el amor por la vida, porque si tu situación es la de sentirte vacía y esperar una relación para estar bien, ésta no será la última relación que tengas donde experimentarás menos placer que dolor.
Abrazos amiga y a levantarse!
Me gustaMe gusta
Muchas gracias Cristina!
Voy a hacerte caso , ya estoy en ello. Es una alegría leerte.
Sigo leyéndote y recomendándote.
Un abrazo grande!
Me gustaMe gusta
Hola, creo que yo he sido la vendedora de humo, quien vengo conociendo salió hace muy poco de una relación y me dice que no puede ofrecerme seguridad, y yo casi que le digo que ya estoy enamorandome y han pasado dos meses desde que nos conocimos, no se si continuar en esto…quizás bajar el ritmo, realmente me gusta mucho
Me gustaMe gusta
Hola G,
Me parece que te has metido en una relación de rebote tras tu ruptura…en esas relaciones es normal que al principio empieces con mucha intensidad y prisa y luego sientas un vacío y pierdas interés. Imagino que habrás «vendido humo» sin ser muy consciente de ello. En cualquier caso, aunque está la opción de intentar ir más despacio, creo que quizás sería bueno plantearte darte tiempo para recuperarte de tu ruptura antes de intentar encajarte a la fuerza en algo para lo que no estás preparada. Seguro que encuentras personas que también te gusten dentro de 3 meses o 6…¡no se van a extinguir los solteros del planeta :)!
Me gustaMe gusta
Hola Cristina, me encanta este blog que, como muchas de las personas que comparten sus historias, me sirve de guía en momentos de bajón, creo que debería leerlo más, en los momentos de no bajón… para no llegar a los bajones!!!
Terminé con una relación de dos años hace unos seis meses en la cual, había mucha dependencia por mi parte y no buenas maneras por la otra.. a parte de, tener un historial de relaciones sin futuro, he estado sola pocas veces y tomé conciencia de todo esto en el momento que eché la vista atrás y me dije a mi misma, el problema lo tienes tu. Me puse a trabajar y decidí que mi prioridad era yo, cuidarme y centrarme en saber estar sola pero, en el momento en el que parecía que estaba remontando un poco y que tenía decidido no tener ningún tipo de relación, apareció una persona (como a los cuatro meses) que a priori, no me gustaba pero que, insistió en conocernos y estuvo en momentos muy importantes para mi hasta que, bajé la guardia y empecé a darme cuenta que me gustaba (teníamos muchas cosas en común y había mucho feeling en todos los sentidos). No es que yo quisiese tener una relación de pareja pero al poco tiempo esta persona, empezó a hacer comentarios haciendo mención a no querer tener pareja o querer estar solo.. y otros al mismo tiempo del tipo, vamos a hacer esto, ir a este sitio o.. nuestra casa estará aquí o allí… Al darme cuenta de que me estaba marcando intenté adelantarme para darnos tiempo.. si es cierto que soy bastante impulsiva y no hice las cosas como es debido, paré la relación pero al poquísimo tiempo me di cuenta de nuevo que, debía relajarme y que si el me marcaba era su problema.. yo debía seguir mi camino porque como he dicho antes, no quería una relación sería.. o eso pienso yo e intenté arreglarlo. En fin, después de cruzar mensajes, llamadas y momentos de tensión (al principio si que el parecía que el quería que fuésemos amigos) esta persona ha decidido por su forma de actuar hacia mi, que no quiere ni siquiera tener una amistad conmigo creo yo ni en el futuro porque, después de pedir disculpas por mi manera de actuar me ignora completamente (y claro envías varios mensajes de esos que no hay que enviar y te sientes como si fuese la acosadora number one). Siento que la culpa de todo esto la tengo yo ya que, no debí meterme en nada cuando yo sabía que no era el momento aunque, el otro insista y además, no he vuelto a tener dignidad conmigo misma y he intentado por lo menos, quedar bien, pensé que me entendería por las conversaciones que hemos tenido y lo que yo le he contado.
Sé que la solución es centrarme en mi y quererme a mi misma pero, ahora mismo me siento tan mal por no haber hecho caso a mi intuición y me siento culpable por haber enviado mensajes intentando arreglar por lo menos una futura amistad y perder a una persona que creo, merece la pena.. Gracias y un abrazo!
Me gustaMe gusta
Hola checkcheck45,
Es normal que te cueste mantenerte en la decisión de estar sola cuando estás muy habituada a permanecer en relaciones de pareja. No te castigues por esta recaída. Al contrario, que hayas vivdo esta experiencia y que te haya reafirmado en que necesitas realmente encontrarte a ti misma antes de establecerte de nuevo con otra persona, es algo muy positivo. Toda experiencia nos enriquece, enseña y guía hacia nuevos territorios de conocimiento. ¿Qué has descubierto que no es tu momento? Fenomenal, eso que has ganado. ¿Qué todavía tienes que aprender que no estás haciendo nada malo por rechazar una relación o por establecer tus límites? Mejor aún, sigue buscando la manera de reafirmarte y sigues practicando el «no quiero», «no me apetece» y «no es lo que busco». Vas por un buen camino, simplemente busca un enfoque consciente que te haga crecer.
Abrazos!
Me gustaMe gusta
«(…) después de cruzar mensajes, llamadas y momentos de tensión (al principio si que el parecía que el quería que fuésemos amigos) esta persona ha decidido por su forma de actuar hacia mi, que no quiere ni siquiera tener una amistad conmigo creo yo ni en el futuro porque, después de pedir disculpas por mi manera de actuar me ignora completamente (y claro envías varios mensajes de esos que no hay que enviar y te sientes como si fuese la acosadora number one). (…) me siento culpable por haber enviado mensajes intentando arreglar por lo menos una futura amistad y perder a una persona que creo, merece la pena.»
Como si lo hubiera escrito yo misma. Y encima es esa sensación de que, por haber querido allanar el camino para una posible futura amistad con alguien que de alguna manera quieres seguir teniendo en tu vida, pueda estar pensando que casi era un acoso o a saber. Ains, esos mensajes que no hay que enviar pero se envían, cuánto pueden complicarlo todo! 😦
Me gustaMe gusta
Tengo 1 año saliendo con alguien que vive en Texas y yo vivo en California … al principio todo iba muy bien … palabras de amor y demás … nos conocimos el año pasado y desde ahí a venido a visitarme como 5 veces … en este tiempo yo no he conocido a alguien de su familia solo a un amigo que es el que trajo la primera vez. Ya llevo 1 año saliendo con él y hace una semana no pude más y lo confronte diciéndole que me diera una explicación del porque no e conocido a su familia o el porque no me a hecho parte de su vida … su respuesta no me convenció .. me dijo «No le había puesto mente … se que es importante pero no lo había visto así» pero después de su respuesta no me dio una solución. Me hubiese gustado escuchar un «tienes razón, no te preocupes dame un tiempo apropiado y haré lo posible porque conozcas a mis papás» o algo así. Pero obviamente no me dijo nada parecido. Me atreví a decirle esto porque al principio de la relación el me habló de que tenía ganas de hacerme su esposa y que me moviera a Texas. Ese pensar me lo ha expresado .. hace unos dos meses no me lo ha expresado pero tiene un mes que vino de vuelta a verme. Lo que se me hace raro es que tengamos un año de relación y no sepa nada de el más lo que el me dice … bueno ese día que lo confronte .. y en base a su respuesta decidí que sería bueno que nos diéramos un tiempo … especifique un mes … ese tiempo solo es para que el vea realmente que es lo que quiere conmigo porque pues yo no soy un juego… el no estaba de acuerdo pero tuvo que acceder … no se si fue lo correcto .. no se si era mejor terminar o si fue bueno darme el mes … que hago una vez que se acabe ese mes de tiempo … ahorita no hablamos para nada … pero cuando se acabe el tiempo no se que hacer …. lo amo y se que el también pero no se si sea confiable…principalmente porque no se nada de el… Que me recomiendas que haga ?!
Me gustaMe gusta
Hola Sammy,
Tu novio (o ex novio) está casado o emparejado, por eso siempre es él quien te viene a verte a ti y no quiere integrarte en su vida.
¿Qué te recomiendo? Que no pierdas más tu tiempo, en este punto si quieres le dices claramente que no seguirás con la relación si no conoces su entorno y a su familia.
Abrazos
Me gustaMe gusta
Hola Cristina.
He leído varías veces las entradas y como ya sabrás son un faro en momentos como este.
Mi experiencia es la siguiente y si sirve como ayuda a alguien mas, con las citas en internet (complicando todavía más algo que ya difícil)
Yo soy de los que siempre está con la mosca detrás de la oreja a ver donde me la van a pagar pero decides dar una oportunidad.
Conozco a una persona que en un principio fue más curiosidad que otra cosa, y quedamos en persona.
Como ya es de suponer, la cosa no fue bien, aquello era el paraíso terrenal. Una cita que duró 9 horas.
Hablamos de todo, gustos muy parecidos, y un derroche de halagos que aquello (desde un punto de vista objetivo hacia aguas por todas partes) a mi me hacia volar en una nube.
Incluso me atrevería a llamarlo terrorismo emocional, de cosas como “como es posible que me importes tanto en tan poco tiempo”, “he encontrado todo lo que necesitaba”, “te va costar librarte de mí con lo que me gustas” y bueno esas cosas que…. que uno no es de piedra vamos.
Tal fue así que bueno me dijo que borraba la aplicación en la que nos conocimos que ya había encontrado lo que buscaba. Y que yo me lanzara, que no tuviera miedo que tenía todas las de ganar.
Me dejo en mi casa y yo me levanté con una sonrisa de oreja a oreja y su mensaje de buenos días pero mi instinto me decía que aquello no era real, algo fallaba y bueno, aún en contra de enfrentarme a la verdad vi que realmente no había borrado la aplicación .
Yo claro, ya todas las alarmas encendidas y como fue algo que me mienten y no me gusta, decidí ser una persona adulta y decirle que es algo que me molesta, justificando que la tiene por falta de novedad sin otro propósito,
Total Me mando a pastar directamente, no si antes soltar unas palabras con una puntería lacerante con el mismo efecto que sus palabras anteriores en las que dijo que habían sido sinceras.
Pasado un rato para quitarle peso al asunto me manda unos mensajes de apoyo que aún me descolocan todavía más a los cuales, yo intentando mantenerme íntegro respondo de manera lo más educada posible sin que se note que estoy por los suelos pero con ganas de vendeta.
Y acabando pedí perdón por mi actitud que dudo si fue correcta o no, pero me hizo sentir culpable y ya hasta dudo de todo en mi manera de actuar al decirle eso. Le pedí si había posibilidad de arreglo a lo que me dijo dame unos días para pensar fríamente y hablamos.
Yo estoy por los suelos, y me siento mal por creerme y engancharme a un cariño que por mucho que parecía un flechazo y una conexión inmediata, no lo acababa de creer, pero que ahora no lo tienes es ese síndrome de abstinencia.
Aun con esperanzas de apelar a la veracidad que lo que dijo aquella noche la cosa se pueda arreglar (ya veis como de tonto puede legar a ser uno y lo que engancha una cosa así)
Gracias nuevamente
Me gustaMe gusta
Hola Cristina,
Casi un año después de mi último comentario vuelvo por aquí. Un año en el que he conocido a algún que otro chaval que por unas o por otras razones no me convencía y al final se quedaba en nada la cosa. El caso es que mi mejor amiga me presentó hace unos 4 meses a un amigo de su novio. Este chico en cuestión me estuvo escribiendo todo diciembre y durante la semana de navidades me decidí quedar con él. Enero y parte de febrero han sido un sueño, tengo que reconocerlo. Llevaba tanto tiempo sin conocer a alguien que me gustara de verdad que me dejé llevar y estaba encantada de que por fin un chico que realmente me gustaba me prodigara tantas atenciones, llamadas e intentar verme en cualquier ocasión que pudiera. “te lo mereces” me decían mis amigas.
La cosa es que de un tiempo a esta parte empezó a estar más distante, lo hablé con él la semana anterior, y me reconoció que había bajado el ritmo porque “no quería construir un edificio sin cimientos”, el motivo me pareció coherente aunque me mosqueó que me dijera que yo “iba muy en serios, básicamente porque en el mes y poco que estuvimos a tope fue él el que llevaba la iniciativa con todo. Fui sincera y le dije que la situación me frustraba porque a mi ahora es cuando me salía estar más cariñosa, y que me frustraba verle más frío. Me ha dicho que él es así, que en el primer mes se pilló pero que ahora quería conocerme.
La última vez que nos vimos esta semana (nos vemos unas 2 o 3 veces por semana) estuvimos genial, súper cariñoso, atento…. cosa que no noto cuando no estamos juntos y me deja perpleja la verdad. Por eso he tomado la determinación de ver cómo evoluciona la cosa en un par de semanas y si no estoy cómoda con la situación plantearlo. ¿De qué sirve estar conociendo a alguien con el que no me siento del todo bien? Imagino que algo anda mal cuando necesito poner esto por aquí.
En cualquier caso,quería agradecerte tu blog por darme la perspectiva de que tenemos que ser sujetos activos de nuestra felicidad y no objetos pasivos, si una relación no me llena, decido sacarla de mi vida, el saberme responsable de mi felicidad me da una paz y una serenidad interior increíble, estoy orgullosa de haber evolucionado así porque hace años no habría reaccionado así y todo gracias a tu blog, a tantas horas de lectura y reflexión, y aprendizaje.
Un abrazo,
Rainheart
Me gustaMe gusta
Hola Rainheart,
Muchas veces he hablado por aquí de cuán a menudo nos enamoramos de la conquista y la confundimos con enamorarnos de la persona, por eso abogo por las relaciones en las que nadie convence a nadie de nada, en las que existe un algo invisible e intangible que conecta al uno con el otro y aunque eso tampoco nos garantiza nada (¿qué lo hace en esta vida?) es cierto que cuando no existe ese equilibrio, es más fácil que surjan estas situaciones de tira y afloja.
Suerte con la historia y a ver cómo evoluciona.
Un abrazo
Me gustaMe gusta
Muchas gracias por contestar tan rápido Cristina. Lo hablé ayer con él y como podrás imaginar, hemos terminado. Por su parte porque está apático (dice que también le pasa con el trabajo) y por mi parte porque no estoy contenta con la situación que teníamos. Me llama la atención lo mucho que decía “no sé”, me dijo que me iba a echar de menos y se iba a acordar mucho de mi, y que no sabía, pero que se iba a arrepentir de su decisión.
En fin, ya sé que es pura palabrería, hasta intentó despedirse dándome un beso. Hoy me ha escrito preguntándome qué cómo estaba; le he dicho que cuando se aclare con lo que quiere, entonces y sólo entonces me escriba. (Cosa qué nivel va a hacer, y sé que al final lo agradeceré) a mis 25 años tengo mucha vida por delante y mucha gente a la que conocer.
Mil gracias por estar ahí aconsejándonos.
Rainheart
Me gustaMe gusta